Cómo Realizar una Investigación Interna Frente a una Denuncia de Violencia o Acoso Laboral

La violencia y el acoso laboral son problemas serios que pueden afectar gravemente el bienestar de los empleados y la reputación de la empresa. Para abordar estas denuncias de manera efectiva, es esencial realizar una investigación interna exhaustiva y objetiva. Esta guía proporciona un enfoque sistemático para llevar a cabo esta tarea.

  1. Crear un canal seguro: Asegúrate de que los empleados sepan cómo y dónde pueden presentar sus denuncias de manera confidencial.
  2. Escuchar activamente: Recibe la denuncia con seriedad y empatía. Asegura a la persona denunciante que la empresa tomará medidas apropiadas.
  3. Documentar la denuncia: Registra todos los detalles relevantes de la denuncia, incluyendo las fechas, lugares y personas involucradas.
  1. Asignar un investigador: Designa a una persona o un equipo imparcial y capacitado para llevar a cabo la investigación.
  2. Definir el alcance: Establece el alcance de la investigación, identificando qué aspectos específicos de la denuncia serán investigados.
  3. Desarrollar un plan de investigación: Crea un plan detallado que incluya entrevistas, revisión de documentos y análisis de evidencia.
  1. Entrevistar al denunciante: Obtén un relato detallado del denunciante sobre los incidentes, asegurándote de hacer preguntas abiertas para obtener la mayor cantidad de información posible.
  2. Identificar testigos: Determina quiénes podrían haber presenciado los incidentes o tener información relevante y programa entrevistas con ellos.
  3. Revisar documentación: Analiza cualquier documentación disponible, como correos electrónicos, mensajes, grabaciones, y registros de la empresa que puedan estar relacionados con la denuncia.
  1. Preparar preguntas: Diseña preguntas específicas y abiertas que ayuden a obtener detalles claros y relevantes.
  2. Crear un ambiente seguro: Asegúrate de que los entrevistados se sientan seguros y cómodos para hablar con franqueza.
  3. Registrar las entrevistas: Toma notas detalladas o, si es posible y legalmente permitido, graba las entrevistas para tener un registro exacto de lo dicho.
  1. Organizar la información: Clasifica y organiza toda la evidencia recopilada para facilitar su análisis.
  2. Buscar coherencia: Compara los relatos y la evidencia para identificar patrones y verificar la coherencia de los testimonios.
  3. Evaluar la credibilidad: Considera la credibilidad de las fuentes de información y la relevancia de la evidencia presentada.
  1. Estructura clara: El informe debe tener una estructura clara, con una introducción, descripción de los hechos, análisis de la evidencia y conclusiones.
  2. Objetividad: Mantén un tono objetivo y evita cualquier sesgo o lenguaje emocional.
  3. Recomendaciones: Incluye recomendaciones basadas en los hallazgos, como medidas disciplinarias, cambios en las políticas de la empresa, o programas de capacitación.
  1. Revisar el informe: Presenta el informe a la alta dirección o al comité correspondiente para su revisión.
  2. Implementar acciones: Toma las medidas necesarias basadas en las recomendaciones del informe. Esto puede incluir acciones disciplinarias, cambios en políticas, o la implementación de nuevas medidas de seguridad.
  3. Comunicar los resultados: Informa a las partes involucradas sobre los resultados de la investigación y las acciones que se tomarán, asegurando la confidencialidad y el respeto a la privacidad.
  1. Monitorear el ambiente laboral: Realiza un seguimiento para asegurarte de que se han implementado las medidas correctivas y que no hay represalias contra el denunciante o los testigos.
  2. Evaluar la efectividad: Revisa periódicamente las políticas y procedimientos para asegurar que sean efectivos y adecuados para prevenir futuros incidentes.

Una investigación interna bien realizada no solo aborda la denuncia específica, sino que también refuerza el compromiso de la empresa con un entorno de trabajo seguro y respetuoso. Siguiendo estos pasos, podrás asegurar que la investigación se lleva a cabo de manera justa y efectiva, protegiendo tanto a los empleados como a la organización.